30 de agosto de 2008

Sólo la lectura nos hará libres-(Diario “El Columnista” de Puebla- 27/08/08)

Los fines de semana suelen ser muy curiosos, por un lado uno lo espera con ansias porque la friega semanal lo exige, pero por el otro son tormentosos porque sabemos de su corta duración, además de que a veces estos pequeños recesos sirven para asear la casa, avanzar con tareas escolares, adelantar trabajo si se puede, entre otras cosas.
-
El sábado pasado, fue diferente para mi, en reunión con unos amigos llego a mis manos un texto denominado: “Cómo aprendió Pinocho a leer” de Alberto Manguel, publicado en Letras Libres en octubre de 2003. Un texto sumamente interesante donde el autor hace un estudio profundizado sobre el cuento de Pinocho y deja en claro que Collodi, autor del cuento, ejerció en tal texto una severa reflexión sobre la sociedad, aún vigente.
-
Copiare algunos fragmentos donde reflexiona acerca de la importancia de la lectura para una sociedad.
-
Escribe Manguel: “No lo sabía entonces, pero creo que Las aventuras de Pinocho me encantaron porque son las aventuras de un aprendizaje. La saga de la marioneta es la que corresponde a la educación de un ciudadano, la antigua paradoja de alguien que quiere formar parte de la sociedad humana al tiempo que trata de averiguar quién es realmente, no como aparece a los ojos de los demás sino a los suyos propios”.
-
Y más adelante continua: “Así pues, el primer paso para convertirse en ciudadano es aprender a leer. Pero ¿Qué significa Aprender a leer? Varias cosas: Primero, el proceso mecánico por el cual se aprende el código de escritura que cifra la memoria de una sociedad. Segundo, el aprendizaje de la sintaxis que gobierna dicho código. Tercero, el aprendizaje de cómo las inscripciones en dicho código pueden servir para conocernos y conocer el mundo que nos rodea de una forma profunda, imaginativa y práctica”. Manguel afirma: “La lectura es una actividad que ha despertado siempre un entusiasmo limitado en aquellos que detentan el poder. No es casualidad que en los siglos XVIII y XIX se aprobaran leyes prohibiendo que los esclavos aprendieran a leer, inclusive la Biblia, puesto que (se argumentaba con justeza) todo aquel capaz de leer la Biblia puede leer también un tratado abolicionista. Los esfuerzos y estratagemas diseñados por los esclavos para aprender a leer son prueba suficiente de la relación que existe entre la libertad civil y el poder del lector, y del miedo que dicha libertad y dicho poder despiertan en gobernantes de todo tipo”. Manguel concluye: “Imaginar es disolver barreras, ignorar fronteras, subvertir la visión del mundo que nos ha sido impuesta. Aunque Collodi fue incapaz de conceder a su marioneta este estado final de autoexploración, intuyó, me parece, las posibilidades de sus poderes imaginativos. E incluso cuando afirmó la importancia del pan sobre las palabras, era muy consciente de que la crisis de una sociedad es, en última instancia, una crisis de la imaginación”.
-
Por eso no es de sorprender, querido lector, que a México le esté yendo como le va, con un presidente (al propósito las minúsculas) que no escucha a su pueblo, con unos medios masivos que mangonean a la sociedad mexicana. Y aunque parezca chiste, en este México risible es posible creer que algunos jóvenes hayan salido a las calles del D.F. a pedir que el grupito de RBD no desaparezca. Y mientras, al país que se lo lleve el demonio.
-
No cabe duda, estábamos mejor con el PRI a la cabeza, al menos los presidentes se esforzaban por ser cultos, los del PAN bueno, ni hablar, uno que no sabía la diferencia entre “Borgues” y Borges, y el de ahora no fue capaz de decretar un homenaje nacional a Octavio Paz, nuestro único Nobel en Literatura.
-
¿Habrá algún día en el que las “idioto-novelas” de Televisa y TV Azteca, o los talkshows de ambas dejen de ser el pan de los mexicanos y se atrevan a tomar un libro aunque sea de Ángeles Mastretta o Laura Esquivel? Ojalá, pero con esos profesores que no pasan ni siquiera el examen de oposición, pero eso sí, tiene su plaza asegurada, las esperanzas disminuyen.

21 de agosto de 2008

Y la muerte nos dio vidas perpendiculares-(Diario “El Columnista” de Puebla- 21/08/08)

La convivencia con escritores siempre es algo que agrada la vida y hace ese momento inolvidable. Los escritores en privado, a pesar de lo que muchos puedan creer, hablan de todo menos de sus procesos de escritura y rara vez de literatura. Hablan de cómo está su familia, de sus experiencias de dar clase, se ponen a comparar los programas de estudios de las Universidades en las que han estado, de sus siguientes proyectos y/o destinos universitarios. Todo eso mientras se disfruta de un café o de un buen cigarro. Algo de lo que pude vivir con Rivera Garza y Enrigue, minutos antes de su conferencia-diálogo que tendrían para los alumnos del Colegio de Lingüística y Literatura Hispánica de la BUAP.
-
Escribir en el centro de México, donde están las editoriales, o fuera de éste, lejanos a las modas, leyendo lo que se publica en la periferia y no en el centro. Dos visiones que vinieron a ofrecer, el pasado jueves a Puebla, Cristina Rivera Garza y Álvaro Enrigue. Tanto Cristina como Álvaro afirmaron que escriben desde la incertidumbre. Para una el proceso es leer todo lo escrito antes de volver a comenzar las siguientes líneas que le irán dando forma a lo que podría ser un cuento, novela o entrada de blog. Para el otro la escritura debe ser algo parecido a lo que piensa un mariscal de campo de fútbol americano quien, a su parecer, debe tener en mente más de ocho jugadas posibles por si alguna se le llegará a frustrar. Rivera Garza escribe donde puede y como pueda, Enrigue lo tiene que hacer en su cuarto personal que está dentro de su casa, pero lo más apartado que se pueda al ruido que ésta genere, y desde luego, al estilo Hemingway, acompañado de un vaso de vodka helado, que para su cerebro surte el mismo efecto que el vick vaporub tiene para las vías respiratorias.
-
Dos escritores que se mostraron contentos en su estancia en Puebla, aseguraron haber disfrutado de la convivencia con los alumnos poblanos. Amenos en el trato, relajientos, risueños, en fin, agradables. Narradores de calidad probada, una acostumbrada a los premios y la gente, otro un poco huraño, que asegura ser hermano de un escritor sumamente famoso –Jordi Soler-, porque él sólo es un simple desconocido que juega a escribir. Cristina es bloguera, Enrigue no tiene blogs –porque no cree en ellos, del todo-, pero disfruta de leerlos.
-
Dos voces narrativas para leer y valorar.
-
Para terminar, no queda más que agradecer el apoyo y la confianza brindada por el Dr. Alejandro Palma Castro, director de la Facultad de Filosofía y Letras, así como de la Dra. Alicia Ramírez, coordinadora de Maestría en Literatura Mexicana-BUAP, de la Mtra. Diana Hernández y del Mtro. Fernando Morales Cruzado. Sin dejar a un lado el constante apoyo del poeta Roberto Martínez Garcilazo –fugado por elección y convicción- y la presencia de Alí Calderón en la presentación de las novelas.
-
Y pobre del que opine lo contrario, porque, sin duda -y parodiando a Enrigue-, habrá que matarlo.

14 de agosto de 2008

“La muerte me da” y “Vidas perpendiculares”-(Diario “El Columnista” de Puebla- 13/08/08)

Cristina Rivera Garza, escritora reconocida tanto a nivel nacional como internacional, siempre procura tener una prosa estable y concreta. Fina a la hora de escribir. “La muerte me da” es la novela más reciente que tiene, publicada por Tusquets, y será presentada este jueves a las 5 PM en el Auditorio Elena Garro de la Facultad de Filosofía (3 Ote #210 Centro) al lado de otro novelista que con poco tiempo, comparado con Rivera Garza, ha demostrado que su prosa es fuerte; me refiero a Álvaro Enrigue, oriundo de la ciudad más sorprendente de este país: el Distrito Federal, autor de “Vidas perpendiculares”, que se presentará junto con la novela de Rivera Garza. Pero antes estarán en la Sala de Proyecciones dando una conferencia para los alumnos de la Facultad de Filosofía y Letras. La entrada para ambos eventos es abierta a todo aquel que guste acercarse a conocer estas voces que no son tan nuevas, pero que definitivamente son los pertenecientes a esa generación mexicana nacida a mediados de los 60´s que han venido a decir: “en México hay algo más, aparte de Rulfo, Fuentes, Poniatowska, Monsiváis y Pitol.”
-
Las narrativas de estos dos escritores llevan al lector a mundos que se antojan ricos. Logran las imágenes que desean que el lector tenga en su mente y hacen que uno lleve en la cabeza por un buen rato lo que ambos relatan en cada una de sus novelas.
-
En “La muerte me da” podemos encontrar una bella línea, con tintes poéticos: “Anhelaba el libro pequeño y bien escrito; el libro hermosísimo cuyo tema fuera el lenguaje mismo. Un libro intenso que la mantuviera, por horas, días enteros, años de ser posible, construyendo su propia morada. Un libro en prosa que no fuera una novela sino una casa”. Esas mismas palabras sirven para definir esta novela. La novela dentro de la novela, la ficcionalización de una gran poeta, Pizarnik, pero de Rivera Garza, también. Una novela sobre la novela. Poesía y thriller.
-
Por su parte, Enrigue crea novelas universales que pueden suceder en todos lados. Con una fuerte influencia, a mi parecer de Sergio Pitol. Novelas que tienen escenarios en México, en Italia y otros lugares. Además de agregar un humor sumamente agradable al lector. “Vivíamos en un cerro que no tenía nombre porque lo de poner nombres es posterior – Ur y lo que siguió son la pura colita de la memoria humana-, pero estaba muy claro que era el Cerro del Lobo porque nuestro padre era su protegido. Todo lo que hacía era untárnoslo en la cara: aullaba como lobo, nos gruñía como lobo, cazábamos a las carreras y haciendo un ruido de locos –una metodología muy desgastante si no eres, en realidad, un lobo-, se revolcaba, se carcajeaba, nos olía el culo y los sobacos, nos soplaba en el pelo. A nosotros no nos escandalizaba su comportamiento porque era lo único que conocíamos y lo imitábamos como podíamos.”
-
Como verá el lector, son dos voces narrativas de las que uno no se podrá arrepentir de leer y de escuchar su visión que tienen acerca de la Literatura.
-
Los esperamos, pues, en ambos eventos. Junto a los autores estarán presentando dichas novelas Alí Calderón Farfán, Alicia Ramírez Olivares, Roberto Martínez Garcilazo y Alejandro Palma Castro.

7 de agosto de 2008

Rivera Garza y Enrigue estarán en Puebla-("El Columnista"-Puebla 06/08/08

Como adelanté la semana pasada Cristina Rivera Garza y Álvaro Enrigue estarán en la Ciudad de Puebla, el jueves 14 de agosto del año que acontece, en un evento organizado por la Facultad de Filosofía y Letras de la BUAP, en coordinación con La Fuga Literaria. A las 12:00 horas darán una conferencia-diálogo en la Sala de Proyecciones del Edificio Carolino y en punto de las 17:00 horas en el auditorio Elena Garro de la Facultad de Filosofía (3 Ote #210 Centro) presentarán sus novelas “La muerte me da” (Tusquets, 2007) de Rivera Garza y “Vidas perpendiculares” (Anagrama, 2008) de Enrigue. Junto a los autores estarán presentando dichas novelas Alí Calderón Farfán, Alicia Ramírez Olivares, Roberto Martínez Garcilazo y Alejandro Palma Castro, moderará este sencillo columnista.
-
Cristina Rivera Garza (Matamoros, Tamaulipas 1964) es narradora, poeta e historiadora; graduada en Sociología por la UNAM y es Doctora en Historia Latinoamericana por la Universidad de Houston; ha sido acreedora a la Beca Salvador Novo 1984-1985, en cuento; a la beca FONCA Jóvenes Creadores 1994-1995, en novela; y a la beca FONCA Jóvenes Creadores 1999-2000 en poesía. Pertenece al Sistema Nacional de Creadores Artísticos (2007). Autora de novelas como “Desconocer”, (finalista del Premio Juan Rulfo para primera novela, 1994); “Cruzar el Atlántico con los ojos vendados” (Tusquets, 2001); “Nadie me verá llorar” (Tusquets, 1999, traducido al inglés, portugués e italiano, además es Premio Nacional de Novela José Rubén Romero, 1997, el IMPAC-CONARTE-ITESM, 2000 y el Sor Juana Inés de la Cruz, 2001), galardón que sólo las mexicanas Silvia Molina (1998) y Elena Garro (1996) han recibido; “La cresta de Ilión” (Tusquets, 2002, finalista del Premio Iberoamericano Rómulo Gallegos en 2003); “Lo anterior” (Tusquets, 2004) y “La muerte me da” (Tusquets, 2007). En cuentos se encuentran: “La guerra no importa” (Mortiz, 1991 que es Premio Nacional de cuento San Luis Potosí, 1987); “Ningún reloj cuenta esto” (Tusquets, 2002, Premio Nacional de cuento Juan Vicente Melo, 2002); y en poesía tiene “Apuntes” (1984, Premio de Poesía Punto de Partida, UNAM), “La más mía” (Tierra Adentro, 1998) y “Los textos del yo” (2006).
-
Álvaro Enrigue (México, 1969) es cuentista, novelista, ensayista y editor. Ha sido profesor de Literatura en la Universidad Iberoamericana y de Escritura Creativa en la de Maryland. Se dedica desde 1990 a la crítica literaria, y ha colaborado en revistas y periódicos de México y España como Lateral de Barcelona, Ínsula, El Nacional, Vuelta y La Jornada Semanal, donde se forjó como un brillante crítico y ha pasado a formar parte de la revista Letras Libres. Fue editor de literatura del Fondo de Cultura Económica. Autor de una tesis de doctorado sobre el dinero y Sor Juana. Entre sus publicaciones se encuentran: “La muerte de un instalador” (Premio de Primera Novela Joaquín Mortiz, 1996), “Hipotermia” (Anagrama, 2007), “Vidas perpendiculares” (Anagrama, 2008), y en las antologías “Dispersión multitudinaria”, “Una ciudad mejor que esta”, “Se habla español”, y “El cementerio de sillas”.
-
Con este evento la Fuga Literaria busca acercar a las voces narrativas que actualmente tienen una fuerte presencia y vienen a ser la sangre que renueva y da vitalidad a nuestra literatura mexicana. Voces que pasan a ser el relevo inmediato de las generaciones de Fuentes y compañía. Pero también es una bienvenida sumamente literaria en la que la nueva administración de la Facultad encabezada por el Doctor y poeta Alejandro Palma Castro y su equipo de trabajo han puesto empeño y entusiasmo con la finalidad de abrir los horizontes a los nuevos estudiantes que ingresarán a clases este 11 de agosto.
-
Caro lector, ojalá y se dé una vuelta por ambos eventos, son dos escritores que valen la pena conocer y escuchar, tienen el reconocimiento a nivel internacional como nacional, por ello, debe difundírseles como se les merece. Nos vemos la siguiente semana con más noticias y amplios recordatorios.